Cuando se habla de aprendizaje como fenómeno psicológico, el cual no necesita mayor traducción al lenguaje del sentido común, se entiende que es un proceso a través del cual se modifican y adquieren habilidades, destreza, conocimientos, conductas y valores. Es tanto un proceso como un resultado, el cual a través de este las personas dan cuenta del cambio propio o ajeno. Sabemos que el aprendizaje tiene una función adaptativa de carácter general y específico, este se relaciona con la producción del conocimiento. Por lo que se pueden diferenciar tres niveles: biológico, social y cultural. El nivel biológico se relaciona con aquellas estructuras y funciones que soportan los diferentes procesos para su desarrollo, de esta manera se entiende que el aprendizaje no es una capacidad exclusiva del ser humano. El nivel social se refiere a la interacción entre los diferentes individuos, este considera la mediación y contexto de experiencia para que el aprendizaje se produzca. El nivel cultural se refiere al papel que cumple la cultura implicada en los procesos de socialización a través del lenguaje tanto oral como escrito, nuestra cultura nos permite como especie establecer un aprendizaje para desarrollarse.
Racionalismo: El aprendizaje tiene funcionamiento cognitivo innato, expresables por la experiencia. “el conocimiento ya está ahí, solo hay que hacerlo aflojar” Pozo, 2008.
Empirismo: Nacemos como tabula rasa, y con nuestras experiencias imprimimos en ella. Teoría del aprendizaje por asociación
Constructivismo: Teoría del aprendizaje por reestructuración, el aprendizaje es construir modelos para luego interpretar representaciones anteriores.
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